Las medias compresivas, son medias elásticas que aplican presión a las piernas, mejorando la circulación y es uno de los tratamientos más comunes para las varices. Se recomienda usarlas durante todo el día, y deben colocarse en la mañana antes de salir de la cama. Si esperas a hacer otra actividad antes de colocarte las medias compresivas, las piernas podrían hincharse.
La compresión que ejercen las medias se mide en milímetros de mercurio (mmHg), y son ofrecidas con diferentes niveles de compresión, siendo vendidas de acuerdo a los siguientes rangos:
Clase I: Ejercen una presión de entre 10-20 mmHg. Pueden ser comprados sin receta medica y son usados para tratar fatiga y pesadez en las piernas y cuando los síntomas de las varices son leves o moderados.
Clase II, III y IV: Estos tipos de medias compresivas solo pueden ser compradas por prescripción de un doctor. Ejercen una presión sobre el tobillo mayor a 21 mmHg. Estas medias compresivas son usadas para tratar casos más severos de varices, así como otras enfermedades asociadas con una circulación deficiente en las piernas.
Ten en cuenta que las medias compresivas pueden resultar incomodas y provocar sensación de calor en las piernas. Además su colocación puede resultar difícil para personas mayores y con sobrepeso.
La compresión que ejercen las medias se mide en milímetros de mercurio (mmHg), y son ofrecidas con diferentes niveles de compresión, siendo vendidas de acuerdo a los siguientes rangos:
Clase I: Ejercen una presión de entre 10-20 mmHg. Pueden ser comprados sin receta medica y son usados para tratar fatiga y pesadez en las piernas y cuando los síntomas de las varices son leves o moderados.
Clase II, III y IV: Estos tipos de medias compresivas solo pueden ser compradas por prescripción de un doctor. Ejercen una presión sobre el tobillo mayor a 21 mmHg. Estas medias compresivas son usadas para tratar casos más severos de varices, así como otras enfermedades asociadas con una circulación deficiente en las piernas.
Ten en cuenta que las medias compresivas pueden resultar incomodas y provocar sensación de calor en las piernas. Además su colocación puede resultar difícil para personas mayores y con sobrepeso.
